¿Cuál es el portabicicletas más popular?
El clásico para el transporte de bicicletas en coche sigue siendo el portabicicletas de techo. Tiene la ventaja de no alterar la longitud del vehículo, lo que supone una gran ventaja a la hora de aparcar y tomar curvas cerradas. Muchos fabricantes ofrecen, sobre todo para furgonetas y SUV, barras de techo que constituyen la base de los portabicicletas. Sin embargo, es posible montar el portabicicletas sin estas barras. El portabicicletas principal se atornilla al marco de la puerta y se fija también con la puerta cerrada durante el viaje. Sobre todo, es importante seguir las instrucciones del fabricante del portabicicletas durante el montaje. Solo así se garantiza que el sistema ofrezca la seguridad necesaria. Se necesitan dos personas para instalar y fijar las ruedas a la estructura. También existen soportes de techo que permiten colocar las bicicletas en posición horizontal y disponen de un dispositivo para elevarlas desde el lateral del coche.
Tenga en cuenta que la altura total del vehículo y la estructura del techo no debe exceder los cuatro metros. Por razones de seguridad, los fabricantes limitan la velocidad máxima permitida con el portabicicletas en el techo a 120 km/h. Una vez finalizada la instalación, realiza una pequeña prueba de conducción con curvas y maniobras de frenado para comprobar y acostumbrarte al diferente comportamiento del vehículo. El portabicicis en el techo lo hace más sensible al viento. Después de unos kilómetros, vuelve a comprobar que los tornillos están bien apretados. Con un portabicicletas montado en el techo, el consumo de combustible aumenta alrededor de un 30%.
Portabicicletas de techo: barato, pero poco práctico
Los soportes de techo cuestan unos 50 euros, así que no son demasiado caros. Sin embargo, son mucho más complicados de colocar que los portabicicletas traseros. En principio, se necesitan dos personas para fijarlo al techo, así que si tienes dudas, lo mejor es que preguntes al mecánico de tu taller. En el techo, las ruedas se sujetan mediante dos barras transversales en las que se guían los neumáticos de las ruedas a modo de raíles. Por lo general, las barras del techo pueden soportar dos o tres bicicletas. Su peso debe distribuirse uniformemente por el techo del coche. La mayoría de los vehículos pueden transportar entre 35 y 100 kg (incluido el peso de la estructura de soporte) en el techo, según el modelo. Por eso es esencial comprar portaequipajes que se adapten al coche.
Portabicicletas de portón trasero: ideal para bicicletas de montaña
Un portabicicletas montado en el portón trasero es una solución especialmente adecuada para bicicletas de montaña. Por lo general, no es adecuado para sedanes tipo notchback, sino casi exclusivamente para coches tipo hatchback o fastback. En este caso, es especialmente importante utilizar un portabicicletas compatible con la marca y el modelo del vehículo. De hecho, los coches por debajo de la categoría de lujo son hoy cada vez más ligeros y estrechos. Esto significa que el espacio libre necesario para fijar el soporte del portón trasero es cada vez menor.
Sin embargo, si las dimensiones del coche y del portabicicletas son técnicamente compatibles, es una buena elección. Es estable y tiene un sistema de fijación sólido. La mayoría de los portabicicletas se pliegan hacia arriba. Esto significa que la longitud del vehículo solo aumenta ligeramente cuando no está cargado. Las desventajas del portabicicletas de portón son una visibilidad reducida hacia atrás y un aumento del consumo de combustible de alrededor del 20%.
Portabicicletas de enganche: ahorro de combustible
Si tu vehículo dispone de bola de enganche de remolque, puedes acoplarle un portabicicletas. Esta es la alternativa más vendida a los portabicicletas de techo, y representa el 80 % de las ventas totales. Estos sistemas de montaje también se conocen como portabicicletas universales. Están normalizados en toda la Unión Europea. Por tanto, son aptos para todas las marcas de automóviles.
La versión básica puede transportar dos bicicletas. Algunos modelos pueden ampliarse para transportar más bicicletas. La principal diferencia con otros tipos de portabicis es que el portabicicletas de enganche también puede transportar bicicletas eléctricas y bicicletas con asistencia eléctrica. Puede transportar hasta 30 kg por bicicleta. Otra ventaja es su baja altura, que facilita la carga y descarga de las bicicletas. Además, la visibilidad hacia atrás queda prácticamente despejada y el consumo adicional de combustible se limita a un diez por ciento. La desventaja de los portabicicletas de enganche es el comportamiento del vehículo en la parte trasera. Es mejor acostumbrarse a ello en un trayecto corto y seguro.
